En Australia el rugby, sea union o league y el fútbol australiano (mejor conocido como footy) siempre han sido los deportes preferidos de los australianos. Son deportes exhiben la rudeza de los australianos, nada que ver al "soccer" el cual era percibido como un deporte de "mujeres, inmigrantes mediterráneos y homosexuales", tal como denunciaba Johnny Warren en su libro. Sumado a que después de 1974 los Socceroos no podían clasificar a la Copa del Mundo (siempre tenían que ir a un repechaje porque Oceanía no tenía cupo directo), incluyendo aquella fatídica noche en Melbourne contra Irán camino a Francia 1998, más los problemas que habían en la National Soccer League (NSL, la liga previa a la A-League) mostraban que el soccer en Australia era un deporte que tuvo que sufrir mucho.
Aún así y a pesar de todos estos problemas, Australia era capaz de exportar jugadores a Europa, la mayoría de estos buscando un futuro mejor para sus carreras. El defensor Kevin Muscat era uno de esos jugadores, pero en vez de hacer historia de una forma positiva como Cahill y Kewell, terminó siendo recordado como uno de los jugadores más violentos que haya pisado el césped. ¿Era acaso la respuesta del soccer australiano a lo que se veía todas las semanas en la AFL y NRL de aquella época? No lo sabemos, pero vaya que estaba cerca.
Un día normal en la vida de Kevin Muscat.
Nacido en Crawley, Inglaterra y con ascendencia maltés, Muscat se fue joven a Australia a jugar fútbol y vaya que lo hacía bien, iniciando en la NSL con el Sunshine George Cross y luego continuando en el Heidenberg United. En 1992 da un paso adelante y se une a la plantilla del South Melbourne Hellas donde se afirmaría como titular mientras que entre 1995 y 1996 estaría a prueba con el Sheffield United, pero regresaría al Hellas. En 1997 da el salto definitivo a Europa y se suma al Crystal Palace, logrando el ascenso a la Premier League venciendo en el play-off en Wembley al mismo Sheffield United, para luego firmar con el Wolverhampton Wanderers... Y es aquí donde empieza todo.
El jugador más odiado
Ya con el Crystal Palace ya se vio lo que era capaz Muscat, cuando hizo un bloqueo con el cuerpo a Darren Eadie en un duelo ante el Norwich City, lo cual provocó una pelea que involucró hasta 21 jugadores y con 3 expulsados, entre ellos Muscat por la falta que hizo.
— Rewind Norwich City (@RewindNorwich) February 8, 2019
Segundos antes de romperle la pierna a Matty Holmes.
Hasta Dennis Bergkamp se las vio con Muscat en la FA Cup.
La reputación de Muscat entre los jugadores de otros equipos era mala, recibiendo críticas de Ian Wright del Nottingham Forest (el cual lo trató de "nadie") y de Martin Grainger del Birmingham City, este último llamándolo "el hombre más odiado en el fútbol" luego de una falta agresiva sobre su compañero de selección Stan Lazaridis. Pero en vez de intentar mejorar su imagen Muscat siguió rompiendo piernas y no solo en el fútbol inglés. Luego de destruir la rodilla izquierda de Craig Bellamy del Norwich City, en 2001 en un amistoso de Australia contra Francia en Melbourne y luego de casi irse a los golpes con Robert Pires (según Muscat, Pires lo escupió) destrozó la rodilla de Christophe Dugarry y lo dejó fuera por 3 meses. El DT de Francia Roger Lemerre dijo que fue "un acto de brutalidad". Al año siguiente en un duelo contra Grinsby Town Kevin sería expulsado a los 9 minutos luego de un codazo sobre Michael Boulding. Como los Wolves perderían ese partido, Muscat fue sancionado con 3 partidos por el club.
En 2002, Muscat llegaría al Premier League de Escocia y ficharía nada más ni menos que por el Rangers, en donde sería parte del equipo que ganó el treble (Liga, Copa Escocesa y Copa de Liga). A pesar de esto, nunca jugó ningún clásico contra el Celtic. Según dicen, existe la creencia de que por su temperamento nunca fue alineado en el Old Firm. El caos que nos privaron de ver.
Milan Baroš también estuvo en peligro.
Mientras tanto en los Socceroos
Kevin Muscat fue capitán en el 31-0 de Australia sobre Samoa Americana. No hubieron lesionados por suerte.
¿Recuerdan a Vampeta?
Con respecto a los Mundiales Muscat nunca pudo jugar uno. Corea/Japón 2002 fue lo más cercano, siendo parte del equipo que jugó el repechaje ante Uruguay y si bien anotó un gol en el triunfo 1-0 en la ida en Melbourne, en Montevideo los Charrúas clasificaron venciendo 3-0. Para el proceso camino a Alemania 2006 y con el repechaje (otra vez) ante Uruguay Muscat no entró en los planes de Guus Hiddink y quedó fuera del seleccionado. Volvería a la selección durante las eliminatorias a la Copa Asiática de 2007 (ya con Australia dentro de la AFC) con Graham Arnold de DT y siendo incluso capitán en un triunfo 2-0 ante Kuwait pero no jugaría en la Copa. Pim Verbeek lo había nominado en la escuadra de 22 jugadores de la A-League de cara a las eliminatorias camino a Sudáfrica 2010, pero no jugó.
Estoy seguro que Muscat hubiera sido leyenda en la liga de Uruguay y hasta en la Copa Libertadores.
En la A-League
Sin registrar más ofensas en los Socceroos aparte de lo sucedido contra Francia y con su experiencia en Europa finalizada, se uniría a la A-League, la nueva liga de primera división de Australia que remplazaba a la NSL, fichando con el naciente Melbourne Victory y en donde tendría sus mejores años en materia de títulos. En 2006/2007 jugando de mediocampista por decisión del DT Ernie Merrick ganaría tanto la Premiership (el mejor equipo en temporada regular) y la Championship (campeón en la gran final) superando al Adelaide United. En 2008/2009 Muscat y el Victory volverían a ganar el doblete volviendo a superar a Adelaide United. Kevin sería el capitán del club hasta 2011, año en que se retiró del fútbol y años más tarde sería elegido en el equipo de la primera decada en la A-League.
Pero mientras cosechaba exitos, sus incidentes volvían a ser noticia. En 2005 se convertiría en el primer jugador en la historia de la A-League en ir a una audiencia disciplinaria de la Football Federation of Australia luego de tener conducta violenta en un partido ante Sydney FC por lo cual fue suspendido 2 partidos más un tercero por acumulación de amarillas. En 2006 tendría uno de los incidentes más recordados en la historia del A-League cuando derribó de su silla a John Kosmina, DT del Adelaide United y en donde luego el mismo Kosmina le agarró el cuello de Muscat. John sería sancionado por 4 partidos. Volviendo OTRA VEZ CON ADELAIDE UNITED (Muscat debe ser el futbolista más odiado en South Australia y por mucho) se salvó de ser sancionado por pisar a Daniel Mullen a pesar que el arbitro vio dicha falta. En 2010 fue suspendido por 2 partidos por un codazo sobre Jason Culina del Gold Coast United mientras que en 2011 por lo mismo sobre Adam Hughes de Adelaide United sería expulsado.
El incidente con John Kosmina.
Pero el incidente más infame, y el más famoso vino en 2011 en el Derby de Melbourne contra el Melbourne Heart (hoy conocido como el Melbourne City). Luego de la suspensión por el codazo sobre Hughes y de cumplir su sanción, a la hora de defender le pegó una falta VIOLENTA sobre la rodilla izquierda de Adrian Zahra. Fue tan grave que fue condenada no solo en Australia sino en el mundo entero. Mark Bosnich (ex Socceroo) lo calificó como una "desgracia", mientras que The S*n lo describió como una de las peores faltas en la historia del fútbol. Pero lo peor fue la lesión que se llevó Zahra, el cual quedó fuera 3 meses y a pesar que logró recuperarse, su carrera nunca más fue la misma. La última vez que jugó en la A-League en 2014 con Perth Glory y de ahí solo ha deambulado en Malta y en las National Premier Leagues de Australia (las ligas estatales que conforman la segunda división). Muscat sería suspendido por 8 partidos y eso aceleró su retiro del fútbol. El último partido que jugó fue en Melbourne ante el Gamba Osaka por la fase de grupos de la AFC Champions League, el cual fue empate 1-1.
La legendaria "chuleta" sobre Adrian Zahra.
Un legado violento.
Kevin Muscat luego se dedicaría a la dirección técnica con Melbourne Victory. Cabe decir que sus primeros pasos fueron como ayudante de Ernie Merrick mientras aún jugaba, mientras que luego del retiro como jugador se dedicaría a tiempo completo a la asistencia. En 2012 asumiría como interino luego del despido de Mehmet Durakovic por malos resultados. En 2013 sería ayudante de Jim Magilton, el cual también sería despedido por malos resultados y sería remplazado por Ange Postecoglou, el cual tuvo un mucho mejor desempeño, el cual le valió para ser contratado por la selección de Australia. De esta manera, Muscat pasó a ser el DT a tiempo completo, ganando las finales de la A-League en 2017 y 2018, más una Premiership de 2014/2015 y la FFA Cup de 2015. Se mantendría en Victory hasta marzo de 2019 y desde esa vez que no ha ejercido la dirección técnica.
Pero lo que más llama la atención en la carrera de Kevin Muscat fue la violencia de su estilo de juego. Además de todo lo dicho por varios jugadores, también se suma las declaraciones de Ashley Young, quien en 2010 dijo que durante su estadía en Watford y en un partido ante el Millwall Muscat le dijo que le rompería la pierna si pasa sobre el, cosa que no sucedió debido a que Kevin fue expulsado luego de aquella falta sobre Danny Webber, mientras que Young entró como sustituto más tarde. Peter Crouch reconoció que fue el jugador que más miedo le dio mientras que Iwan Roberts del Norwich City se vengó de la lesión que provocó Muscat sobre Craig Bellamy pisándolo por atrás en el 2000.
¿Y que tal como jugador? Pues a pesar de toda la maldad, como defensa fue un gran jugador y que llegó a ser incluso capitán de la selección de Australia. Por otro lado en Melbourne Victory es leyenda debido a todos los títulos que consiguió como jugador y entrenador, mientras que entre tantas críticas también llevó aplausos de Terry Butcher, aquel jugador inglés que todos recordamos por su cara ensangrentada mientras jugaba por Inglaterra. Pero además era un tipo muy apasionado por el fútbol con mucho conocimiento sobre el deporte, lo cual quedó plasmado en su carrera como entrenador.
Kevin Muscat no es el único jugador de su estilo, hay varios más en el mundo así, pero que ya te conozcan por ser el jugador de fútbol más odiado en el mundo es porque llevaste las cosas a un nivel de violencia capaz de hasta destruir carreras.
Por cierto, en 19 años de carrera terminó con 123 tarjetas amarillas y 12 rojas.